Rosa Bravo es la niña bonita del ciclo-cross nacional. La vallisoletana de Laguna del Duero es la especialista por excelencia y la opción más sólida, a varios meses vista, de cosechar un buen resultado en los próximos mundiales de ciclo-cross englobando las diferentes categorías que allí se dan cita.
Pero si estuviésemos en un bingo, la niña bonita sería el número 15, posición que bien pudiese representar la barrera infranqueable hasta la fecha para Rosa Bravo en cualquier evento internacional.
Rosa Bravo Soba, cumplió 30 años el pasado Agosto, y llegó al ciclo-cross de una forma inesperada, puesto que nunca había practicado esta especialidad, centrándose únicamente en el ciclismo en carretera. Pero tras unas graves desavenencias con el seleccionador nacional de ruta femenino dio un giro radical a su carrera deportiva centrándose en el ciclo-cross y siendo desde entonces contadas las ocasiones en las que ha participado en carretera.
La ruta se perdió una gran ciclista que sin embargo el ciclo-cross ganó. Así de esta rocambolesca forma el ciclo-cross nacional obtuvo una representante de entidad en una especialidad que acostumbraba a convocar a ciclistas como recompensa por el trabajo anual. Con la aparición de Rosa Bravo la selección contaba con una fémina con la que ambicionar un mejor resultado final y acudir a las citas internacionales con la intención de ser algo más que una mera comparsa.
Rosa Bravo ostenta los mejores puestos jamás logrados por ninguna ciclista en ningún campeonato internacional, aunque también hay que decir, que la instauración de la categoría femenina es reciente, ya que no fue hasta el año 2000 cuando en St. Michielgestel (Holanda) se puso en juego el primer maillot arco-iris.
Actuaciones de Rosa Bravo en los últimos campeonatos celebrados:
17ª.- Campeonato del Mundo de Ciclo-Cross de Zeddam 2006 (Holanda)
16ª.- Campeonato de Europa de Ciclo-Cross de Pont-Château 2005 (Francia)
22ª.- Campeonato del Mundo de Ciclo-Cross de St.Wendel 2005 (Alemania)
¿Está en disposición de superar la barrera anteriormente mencionada?
En el pasado mundial de Zeddam pudimos contemplar como tras una magnífica salida, era capaz de pasar la primera de las vueltas en octava posición, manteniéndose entre los puestos 12º y 15º durante buena parte de la prueba, para acabar pagando el esfuerzo y finalizar en la 17ª plaza.
El seleccionador nacional, Fran Pla, se mostraba contento con la actuación de la vallisoletana, puesto que hizo un excelente mundial, aunque se mostraba convencido de que la posición obtenida por la ciclista, era poco premio para la actuación y el comportamiento de la pucelana durante la prueba.
La propia ciclista también acabó con un sabor agridulce la prueba, ya que veía como a pesar de ser la mejor posición jamás lograda por una ciclista en un Campeonato del Mundo, consideraba que finalizó más retrasada de lo que ella había visto poder alcanzar en carrera. En un circuito rápido, con el firme en buen estado, al que la ciclista vallisoletana se amoldó perfectamente y en el que se encontró muy cómoda, dejó escapar una preciosa oportunidad de mejorar lo hasta entonces conseguido.
Pero quizá la barrera de Rosa Bravo sea esa, ya que a pesar del talento ciclista que posee, tiene lagunas que aún centrada en esta especialidad no ha conseguido solventar o al menos no en el grado que le permita estar más adelante de lo que ya está.
Con problemas cuando en cualquiera de los diferentes circuitos tiene que descabalgar de su montura y cargar con ella, así como arrastrando la costumbre de no utilizar los cambios, hace que ya desde la misma línea de salida parta con una desventaja, que a este alto nivel donde nos circunscribimos, sean significativos.
También carece de valentía cuando tramos complicados son los que debe afrontar, especialmente si en el circuito aparece alguna bajada comprometida o peligrosa, además de que mentalmente no es fuerte, y se viene abajo ante cualquier contrariedad e incluso duda de si misma, cuando las rivales en un principio inferiores la ponen en aprietos y acosan su posición durante la carrera.
Por si fuera poco, la estrecha diferencia existente entre las ciclistas que conforman la élite mundial del ciclo-cross hace que sea muy importante saber moverse, circular y afrontar situaciones en las que se rueda en grupo o con un estrecho margen ente las ciclistas que una tiene delante y/o detrás. Desgraciadamente la poca experiencia que tiene ante tales situaciones, ya que el panorama femenino del ciclo-cross está prácticamente desierto, y las pocas que allí aparecen, tienen muy diferentes niveles, hace que no sepa manejar situaciones de este tipo, privándole de alcanzar mejores posiciones de las que por el esfuerzo desarrollado hubiese merecido.
A pesar del hándicap, la ciclista española está ahí por su talento, además tiene a su favor, que buena parte de las ciclistas tienen una edad considerable y es que salvo pocas excepciones sobresalientes son las veteranas quienes dominan el panorama internacional.
Las principales rivales que se ha encontrado y las que previsiblemente se encontrará son:
Las indiscutibles:
- Hanka Kupfernagel (19/03/1974) - Alemania
- Marianne Vos (13/05/1987) - Holanda
La alemana de 32 años es toda una institución en el mundo del pedal femenino, y en lo que a ciclo-cross se refiere arroja un escalofriante palmarés ya que es la única corredora que siempre se ha subido al podium desde que se disputan los campeonatos del mundo femeninos.
Quizá Marianne Vos, comparado con Kupfernagel, da la sensación que no merecería estar al mismo nivel, especialmente si hacemos una comparación teniendo en cuenta el palmarés, pero es que esta maravilla de ciclista holandesa cuenta todavía con 19 años, y de forma asombrosa durante el año 2006 se ha proclamado campeona del mundo tanto en carretera como en ciclo-cross. Ahí es nada.
Las alternativas:
- Daphny Van den Brand (06/04/1978) - Holanda
- Laurence Leboucher (22/02/1972) - Francia
- Maryline Salvetat (11/08/1974) - Francia
De este pequeño grupo saldrán las ciclistas que en mayores aprietos pondrán a las reinas de este deporte. La holandesa Van den Brand, conocida por su famosas trenzas, es a sus 28 años, la ciclista que tras Kupfernagel mayor número de medallas ha obtenido en los mundiales disputados hasta la fecha. Eclipsada por la estelar aparición de Marianne Vos en el mundo del ciclo-cross de su país, es una ciclista que estará en los lugares de privilegio a pesar de que la luz con la que apareció en el concierto mundial no brilla tan espléndidamente como antes.
Las dos ciclistas francesas son veteranas, especialmente Leboucher que poco después de la cita mundialista cumplirá 35 años, y que a decir verdad, no goza del pedaleo que tenía hace tan sólo un par de temporadas, que le sirvió en los años 2004 y 2002 para hacerse acreedora de dos maillots arco-iris. Sólo es superada en cuanto a número de títulos mundiales por Kupfernagel, pero salvo la edición intermedia a sus títulos mundiales, en la que obtuvo una medalla de bronce, no ha vuelto a colgarse un metal en su cuello, aunque no es menos cierto, que su competitividad le posibilitará rondar las posiciones de privilegio y quien sabe si volver a subir a cualquiera de los escalones del podium mundialista.
Maryline Salvetat no es una ciclista tan reconocida como su compatriota, puesto que tan sólo en su palmarés guarda una medalla de plata obtenida en la edición 2004 que se disputaba en suelo galo, pero tiene una cualidad que la hace merecer el reconocimiento de todos, y es que goza de una regularidad y una fiabilidad pasmosa. Posiblemente no esté entre las llamadas a ganar una medalla, pero no existe ninguna duda de que muy cerca de ellas estará.
Las incógnitas:
- Mirjam Melchers-Van Poppel (26/09/1975) Holanda
- Sabine Spitz (27/12/1971) Alemania
La alemana es poco probable verla, ya que su única aparición estelar en ciclo-cross fue con la disputa del mundial en su país, contribuyendo al doblete femenino que las germanas obtuvieron. Una ciclista centrada en el Mountain Bike, que dejó impronta de su clase en el helado trazado alemán de St. Wendel, y que si decidiese estar presente en la cita mundialista, a buen seguro que su resultado sería brillante.
Mirjam Melchers-Van Poppel aunque es una habitual del ciclo-cross no en vano, obtuvo una medalla de bronce por detrás de Kupfernagel y Spitz en St. Wendel, y en la última edición de Zeddam se clasificó en la cuarta plaza, es una ciclista que generalmente cae en el olvido en esta especialidad. El potencial femenino de su país, así como lo poco que se prodiga en las competiciones internacionales, hace que sus participaciones se tornen incógnitas cuando tanto tiempo queda para llegar a la cita. Cuando el evento esté próximo a su celebración a buen seguro que las duda se irán despejando.
A la espera:
- Birgit Hollmmann (31/12/1973) Alemania
- Nadia Triquet-Claude (25/10/1978) Francia
- Reza Hormes-Ravenstijn (06/02/1967) Holanda
- Arenda Grimberg (10/03/1978) Holanda
- Christel Ferrier-Bruneau (08/07/1979) Francia
No es sencillo estar y crecer a la sombra de unas ciclistas que lo copan todo, y es que como se puede comprobar, las dominadoras del ciclo-cross mundial se circunscriben a unos determinados países de procedencia. Hollmmann se intuye como una cada vez más peligrosa rival mientras que Triquet-Claude y Ferrier-Bruneau intentan hacer más peligroso, si cabe, el buen hacer galo en esta especialidad. En cuanto a Hormes-Ravenstijn, con 20 años más de edad que Marianne Vos, es un canto a la longevidad deportiva digno de admirar, y a pesar de que tras el mundial cumplirá 40 años, se mantiene en la élite mundial con suficiencia, mientras que su compatriota Grimberg, oculta siempre tras el brillo de sus compañeras de selección, está siempre al asalto de las posiciones de privilegio.
El peligro no continental:
- Helen Wyman (04/03/1981) Gran Bretaña
- Ann Knapp (19/12/1968) EE.UU.
- Lyne Bessette (10/03/1975) Canadá
Fuera de la Europa Continental hay vida, y lo pone de manifiesto una joven ciclista británica, Helen Wyman que a sus 25 años está llamada a intercalar su maillot en los puestos cabeceros entre las habituales propietarias de éstos. Es una ciclista que se está asentando en la élite de la especialidad, y que no debería sorprendernos si se lleva un metal para las islas como en su día hizo la veterana y todavía en activo a sus casi 42 años, Louise Robinson, en el primer mundial disputado en el año 2000.
Knapp y Besette son el estandarte del ciclo-cross norteamericano, un ciclo-cross en la que la presencia femenina va más allá de lo meramente testimonial y no son pocas las mujeres que participan en esta especialidad invernal. Desgraciadamente no gozan de la competitividad necesaria por el aislacionismo continental de un ciclo-cross que se circunscribe prácticamente a la Europa Central pero siempre han aparecido ciclistas norteamericanas en los primeros puestos de los campeonatos del mundo, y estás dos ciclistas a buen seguro que seguirán manteniendo la tradición.
A partir de aquí bien podría entrar Rosa Bravo, pero son tantas las vicisitudes favorables que deben darse para que fuera posible verla a la estela de estas ciclistas, que es recomendable apuntar a aquellas ciclistas que tienen tantas o más posibilidades de ocupar las posiciones por las que luchará Rosa Bravo, pero que si es la vallisoletana es quien lo logra, no debería sorprendernos.
Así que si para las anteriores ciclistas no entra dentro de sus previsiones verse por detrás de la ciclista española, algunas de las ciclistas que se citarán a continuación lucharán con Rosa por los mismos objetivos.
A la par:
- Anja Nobus (09/04/1974) Bélgica
- Susanne Juranek (25/02/1975) Alemania
Nos limitaremos a señalar dos ciclistas por lo habitual de la presencia de ambas en la especialidad ciclopedestre. Sorprende que la categoría masculina esté copada por ciclistas de procedencia belga y sin embargo las féminas de ese país, no estén a la altura de sus compatriotas. Es quizá Nobus la ciclista que más confianza transmite de ese país, que sin embargo está lejos de acercarse lo más mínimo a lo que realizan sus compatriotas masculinos. Juranek es una ciclista de un nivel similar a Nobus, seria y metódica, que está lejos de ofrecer el nivel estelar de otras compatriotas suyas, aunque eso no quita para reconocer a esta competitiva ciclista.
Jóvenes y peligrosas:
- Veerle Ingels (24/12/1981) Bélgica
- Sanne Cant (08/10/1990) Bélgica
- Linda Van Rijen (15/06/1988) Holanda
- Daniela Bresciani (04/07/1982) Italia
- Francesca Cucciniello (08/09/1984) Italia
- Gabriella Day (01/12/1984) Gran Bretaña
Cuando uno ve la edad de las ciclistas que domina el panorama internacional, todo aquella ciclista que haya nacido en la década de los 80 le parece una persona joven aunque para otros pudiera no serlo, pero a lo que a todas luces es un hito de precocidad, es la edad de la belga Sanne Cant, que a sus 16 años ya se codea con la élite mundial. No por llegar antes se llega más lejos, pero hace pensar que el futuro belga es más ilusionante que su presente, cuando además de a esta ciclista, unimos el nombre de Veerle Ingels, que próxima a cumplir 25 años, progresa adecuadamente y se está haciendo un nombre en la especialidad.
Es difícil de hablar de futuro en Holanda más allá de Marianne Vos, ya que siendo tan precoz en la conquista de cetros mundiales, da que pensar que su reinado se extenderá a lo largo de los próximos años, pero también hay jovencitas como Linda Van Rijen que a sus 18 años está en disposición de que en un futuro no muy lejano, junto con ciclistas como Marianne Vos, perpetuarán el dominio holandés en la especialidad.
Daniele Bresciani y Francesca Cucciniello son dos jóvenes aunque experimentadas ciclistas italianas de 24 y 22 años respectivamente. Son el relevo de ciclistas como Annabella Stropparo y Maria Paola Turcutto, que en su día, y especialmente cuando el mundial se disputó en suelo italiano, pusieron al ciclo-cross italiano a un nivel que ahora no poseen y que estas jóvenes están llamadas a recuperar.
Gabriella Day es una joven británica próxima a cumplir los 22 años de edad, en lo que junto a su compatriota Helen Wyman anticipa un buen futuro de la disciplina en las islas británicas, cosa que no ocurre en cualquiera de las categorías masculinas.
Quizá para alguna de estas jóvenes aun sea pronto y otras debido a su precocidad llegarán a la élite antes de lo imaginado, pero no deja de ser cierto, que en un mundo copado prácticamente en su totalidad por veteranas ciclistas, estas jóvenes están llamadas a ser su futuro relevo, y en lo que respecta a su presente deben ser tenidas en cuenta, puesto que posiblemente las veamos luchando con Rosa Bravo por objetivos similares.
Una vez presentadas las principales rivales de la vallisoletana y animando con ello a seguir las evoluciones de las féminas a lo largo de todo lo que queda de campaña, mi pregunta sigue siendo la misma, ¿conseguirá Rosa Bravo superar la barrera?